Última crónica (tal vez penúltima) y última madrugada de este fantástico "Isín 2024". A estas horas el simple intento de explicar el día de hoy resulta complicado por la cantidad de cosas vividas y por el cansancio ya acumulado. Así que vamos a ver que sale de esta cabeza que ya solo puede pensar de manera lenta aunque emocionada, como siempre, y especialmente en esta última noche en Isín.
El último día completo en Isín ha sido de los intensos de verdad. Desde que nos hemos levantado no hemos parado de hacer cosas, y además las emociones se multiplican y todo lo vives con más intensidad ya que eres consciente de que se acerca el final. Después del desayuno hemos organizado las mochilas y nos hemos preparado para ir a Sabiñánigo con el objetivo bien claro de la solidaridad. En la mochila llevábamos además de los bocatas, la cámara de fotos y la crema solar...un montón de esperanza, un buen trozo de ánimo y una cantimplora llena de ganas. Los de Isín pensamos que merece la pena hacer el esfuerzo para conseguir ser solidarios entre nosotros y con las personas que van a disfrutar de nuestro pueblo. Así que hemos decidido donar a la Fundación Adislaf (responsables de Isín) la cantidad conseguida en el mercadillo solidario de Sabiñánigo.
El campamento se acaba y el cansancio acumulado se ha notado en algunos de ellos/as esta mañana, sobre todo a la hora de organizar los puestos o de entablar contacto con los posibles clientes. Y es que el tute isiniano es importante y pasa factura, pero solo a nivel físico, la parte emocional está intacta.
En Sabiñánigo siempre nos reciben con los brazos abiertos, y enseguida los paisanos y paisanas han colaborado con nosotros en la organizaión de espacios de la Plaza Santa Ana. Distribución de tareas, presentación de los productos, elección de los precios y ¡A VENDER CHICOS!... La hora era la buena, justo en el momento de trasiego de compras y recados matutinos. De esa manera bastantes personas han pasado por la plaza, atraidos por la música y la palabras de la megafonía. Los chicos y chicas estaban excitados con el momento. Para ellos era una responsabilidad atender a las personas, explicarles el proyecto y manejar el dinero. Tenemos que decir que lo han hecho de maravilla y el objetivo educativo se ha cumplido con creces. La gente se ha acercado hasta nosotros interesándose por la propuesta y han comprado muchos productos. Este año la solidaridad ha sido en forma de pulseras, collares, abanicos de papel pintados, llaveros, piedras decoradas, tote bags... todo hecho con mucho cariño, y es que no sabemos hacerlo de otra manera. Aquí ha participado todo el mundo, cada uno en su nivel de talento para la elaboración de los talleres.
Varios grupos de alumnos/as ha recorrido Sabiñánigo ofreciendo los productos a los comercios de la Calle Serrablo, y a las personas que en ese momento se encontraban en las terrazas, para que nadie se quedara sin la posibilidad de ser solidario con nosotros. El ambiente ha sido fantástico, la gente ha respondido fenomenal y la experiencia ha resultado muy buena. Este mercadillo se ha convertido ya en una especie de tradición y el día es muy bonito en Sabi porque llenamos la plaza y sus calles adyacentes de ruido, risas y colorido. La verdad es que el Colegio Alemán de Zaragoza está muy presente a lo largo de todo el Valle de Acumuer y también en Sabiñánigo durante nuestra estancia en Isín.
Después de devorar los bocatas para alimentarnos, nos hemos comprado un merecido helado, un refresco y alguna que otra chuchería.
Ya por la tarde y antes de llegar a Isín, nuestros choferes de autobús nos han descargado en el río Aurín, para disfrutar de un baño en un entorno natural. Este año el río baja cargado de agua, y ha sido una gozada remojarnos en la cascada, nadar en las pozas y merendar todos juntos rodeados de un paisaje precioso. La tarde de río es otro de esos momentos importantes del campamento, y este año hemos tenido la oportunida de disfrutarla dos veces (una más para el grupo de 4º). Para muchos de nuestros alumnos es la primera vez que se desenvuelven en un entorno de estas características. ¡Ha sido fantástico!.
La última cena de Isín ha sido especial y Gouda nos ha deleitado con pizza, tortilla de patata y un fabuoso arroz a con leche casero.
Después rápido rápido a ponerse guapos y guapas para comprar un en nuestro particular mercadillo solidario y poder llevarnos a casa un recuerdo de este Isín, y de paso colaborar con la Fundación Adislaf. Finalmente hemos vendido prácticamente todos los productos en el día de hoy y bajamos a Zaragoza con una “ayudica” para esta asociación que realiza una labor tan encomiable y necesaria. con el colectivo de la discapacidad intelectual. Lo de ponernos guapos no era por el mercadillo sino por la gran fiesta final que teníamos esta noche. Algunos han entrado en pareja, otros en grupo…daba igual; lo importante era poder disfrutar de la última noche bailando mucho y compartiendo las pelucas y complementos que han ido apareciendo durante todos estos días por Isín. La velada se ha alargado más que otras noches, pero la ocasión lo merecía. La gran sorpresa de de la velada ha sido que el dj ha sido nuestro cocieno Gouda, y es que este personaje ya mítico de Isín además de cocinar de maravilla pincha música en sus ratos libres. Él ha decidio regalarnos una noche muy especial con la selección de sus canciones en nuestra querida plaza del pueblo.
Este año Isín nos ha mostrado la imaginación, los valores y la diversión a través del misterioso mundo de SherlockSin y Zarmot. Hemos conocido alguno de los artistas mas originales o famosos de la música, pero sobre todo, este grupo de alumnos y profesores del Colegio Alemán hemos tenido la oportunidad de vivir, investigar y escribir nuestra propia aventura. Una aventura que habla de relaciones, de aprender, de enseñar, de reír, de compartir, de tomar decisiones, de emocionarse… . Una aventura que no se ha escrito sobre un papel, sino sobre los corazones de un grupo de personas que decidieron involucrase en esta bonita experiencia, donde una máquina de cartón hecha a mano, ha servido para devolver y valorar los talentos de las personas. En este caso de 67 personas de 3º y 4º de Primaria que han demostrado el "talento de querer aprender a convivir" en uno de los rincones mas espciales del mundo, el pueblo de Isín.
Un año más, el grupo de responsables de este “Isín 2024” (Ana, Carlos, Alba, Adrián, Bea, Jaime, Valentina, Sonia, María y Jorge) queremos agradecer a todo el personal de Isín las facilidades, el cariño y el apoyo durante estos días; y a todas las familias de nuestro colegio, la confianza depositada en este maravilloso proyecto que ha cumplido 14 ediciones y 16 años de historia. Algo que para nosotros es más que una colonia de verano. Regresamos a casa cansados pero orgullosos de todo lo que hemos podido desarrollar con ilusión y creatividad.
Esperamos que hayáis podido disfrutar de la experiencia con las fotos, los mensajes y las crónicas noctábulas como lo hemos hecho todos nosotros. Ya quedan pocas horas para poder compartir uno de los misterios mas importantes, el de los abrazos en los reecuentros, algo "elemental" en la vida de las personas.
Hasta siempre.